Quienes Somos

Nos conocemos de toda la vida. Crecimos a pocas cuadras, fuimos al mismo colegio en Pilar, pasamos veranos enteros entre piletas, protector solar y ese intento constante de conseguir un bronceado perfecto. Siempre nos gustó vernos doradas, pero con el tiempo nos dimos cuenta de algo: lograr un bronceado natural sin exponer la piel demasiado era mucho más difícil de lo que parecía.

Probamos de todo: autobronceantes que manchaban, camas solares que descartamos rápido y suplementos importados que prometían milagros pero no tenían respaldo. Nos preguntamos mil veces ¿cómo puede ser que no haya algo efectivo, seguro y aprobado en Argentina? Y esa pregunta se convirtió en un desafío.

Así empezó Tanny.

Soy Ine, y esta historia la escribo yo, pero la vivimos juntas con Sofi. No hay un día en que no estemos hablando de esto, porque para nosotras Tanny no es solo una marca, es el resultado de años de búsqueda, de probar, fallar, ajustar y mejorar hasta dar con lo que queríamos.

Cuando terminamos el colegio, cada una siguió su camino profesional: Sofi estudió Nutrición y yo, Administración de Empresas. Dos mundos distintos que, sin darnos cuenta, iban a ser el complemento perfecto para lo que vendría después. Sofi siempre tuvo un enfoque técnico sobre lo que consumimos y cómo impacta en el cuerpo, mientras que yo me incliné por la estrategia y el desarrollo de negocios. Con el tiempo, profundicé mis estudios en marketing, branding y relaciones públicas, haciendo posgrados y capacitaciones que terminaron siendo clave para que Tanny creciera como marca.

Cuando finalmente tuvimos claro lo que queríamos crear, registramos la marca. Queríamos un nombre que nos representara. "Tan", por bronceado, pero también porque nos gusta la idea de "tan" como algo más, algo mejor. Y "Sunny", porque aunque nuestras cápsulas no dependen del sol para funcionar, siempre pensamos en el bronceado como algo que se asocia con la luz, el verano y la energía de los días soleados. Queríamos que el nombre reflejara esa sensación de piel radiante y luminosa, sin importar la estación del año.

Después de definir la marca, empezamos el proceso más importante: conseguir las certificaciones necesarias para lanzar el producto. Pasamos dos años investigando, recorriendo laboratorios, consultando con dermatólogos, hablando con fabricantes y proveedores, buscando los mejores ingredientes y asegurándonos de que todo estuviera aprobado. Trabajamos para conseguir la aprobación del Instituto Nacional de Alimentos (INAL) y el Registro Nacional de Productos Alimenticios (RNPA) dentro del marco regulatorio de ANMAT, porque para nosotras no se trataba solo de vender, sino de hacer las cosas bien.

Pero no nos íbamos a quedar ahí. Sabíamos que un bronceado sin glow no es lo mismo, así que creamos el Shimmer Body Oil, el complemento perfecto para potenciar la piel con luminosidad e hidratación.

Lo que empezó como un proyecto entre dos amigas, hoy es un equipo. Con el crecimiento de Tanny, pudimos expandirnos y rodearnos de profesionales que nos ayudan a seguir llevando la marca a otro nivel. Sumamos una community manager, editores, diseñadores y especialistas en comunicación, porque entendimos que para seguir creciendo necesitábamos delegar y confiar en gente que compartiera nuestra visión.

Hoy, después de todo este camino, ver Tanny en manos de +200.000 personas nos llena de orgullo. Lo que empezó como una conversación entre amigas, hoy es una marca que nos representa.

Les dejamos nuestra foto favorita para que nos conozcan. Nosotras ansiamos que prueben el producto que hicimos con tanto amor y escuchar sus experiencias.

¡Gracias por ser parte de esto!